Nos complace compartir que en la Unidad Educativa Santa Mariana de Jesús en Guayaquil, nuestros estudiantes están participando activamente en la Infancia Misionera. 
Nuestras niñas y niños embajadores están aprendiendo sobre la importancia de compartir el amor y la paz en todo el mundo. 
La Infancia Misionera es un movimiento eclesial que busca despertar en los niños y niñas el espíritu misionero, siguiendo el mandato de Jesús: “Dejad que los niños vengan a mí, porque de los que son como ellos es el Reino de Dios” (Marcos 10:14).
La importancia de la Infancia Misionera radica en su capacidad para formar a los niños en la fe desde una edad temprana, enseñándoles a vivir el Evangelio en su vida diaria y a compartirlo con otros, especialmente con aquellos que aún no lo conocen.
Los niños misioneros aprenden a rezar, a amar y a ofrecer sus vidas por la misión de la Iglesia en el mundo. A través de su participación, se convierten en pequeños apóstoles que llevan la luz de Cristo a todos los rincones del mundo.
Recordemos las palabras del Papa Francisco: “Cada niño que se acerca a Jesús hace crecer la alegría de Jesús, la alegría de la Iglesia”. Así, la Infancia Misionera contribuye a la alegría y al crecimiento de la Iglesia.
Apreciamos su entusiasmo y dedicación, y estamos emocionados de ver cómo crecen en su fe y compasión. 
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